Si alguna vez ha visto los grandes pagos que dan las tragaperras y te has preguntado cómo podrías ganarlos, la respuesta es los jackpots.
Todas las tragaperras ofrecen premios en dinero real, pero los pagos más significativos suelen ser los jackpots.
Se trata de una categoría especial de premios que es particularmente muy lucrativa.
Cabe destacar que no todas las tragaperras tienen jackpots -también llamados botes- y que no todos los jackpots tienen la misma tasa de pago.
A continuación explicamos todo lo que necesitas saber sobre estas recompensas y la forma en que los jugadores pueden tener la oportunidad de ganarlas.
Los jackpots son un tipo de pago que puede tener un valor fijo o variable.
Aunque siempre es bueno ganar el dinero que paga un jackpot, no todos ellos son tan cuantiosos como te los imaginas.
En algunos juegos, el monto que paga el jackpot ni siquiera es el premio más alto disponible.
En términos generales, los jackpots pueden dividirse en dos grupos diferentes.
Estos jackpots son premios que van desde los más comunes hasta los más impresionantes e incluso muchos juegos tienen más de un jackpot fijo.
Es muy común que las tragaperras tengan de 3 a 4 jackpots fijos con títulos como "Minor", "Mini", "Grand" y "Mega".
Los jackpots fijos no son siempre el mayor pago del juego, aunque a menudo representan una gran ganancia.
Los jackpots más pequeños se ganan con más frecuencia que los premios más grandes y estos pueden oscilar en torno a las 10x.
Si ha escuchado alguna vez la noticia sobre jugadores de tragaperras que ganaron enormes jackpots, seguramente se trató de un jackpot progresivo.
Este tipo de premios comienza con una suma mínima y va aumentando a medida que más personas juegan.
Una pequeña parte de cada apuesta se destina a aumentar el monto de jackpot progresivo, y esto puede llegar a ser una gran suma si nadie ha ganado ese premio con anterioridad.
Los jackpots progresivos tienen el gran potencial de llegar a sumas de dinero tan elevadas porque todos los jugadores de la red están conectados al mismo pago.
Dado que una parte de todas las apuestas ayuda a aumentar el valor del premio, el pago puede elevarse de forma considerable, aunque las probabilidades de ganar son muy escasas.
Es conveniente recordar que, como una parte de la apuesta se destina al jackpot progresivo, es habitual que otros premios del juego y las tasas de pago sean menores en este tipo de tragaperras.
Cada tragaperras tiene sus propias reglas específicas para ganar el jackpot y por eso es importante verificar la tabla de pagos.
En algunos juegos, los jugadores solamente podrán ganar el jackpot si apuestan por encima de una determinada cantidad de dinero.
En otras tragaperras, la probabilidad de ganar aumenta si se hacen apuestas altas.
Es esencial conocer y entender cómo funcionan los jackpots para poder diseñar la mejor estrategia para jugar las tragaperras con estos premios.
Asimismo, los jackpots pueden activarse de varias maneras. En algunos juegos, es posible que tenga que completar el nivel superior de una función de bonificación, como llenar toda la pantalla con símbolos.
Sin embargo, muchos jackpots se activan de forma aleatoria, especialmente los progresivos.
Lo anterior significa que cualquier jugador tiene la posibilidad de ganar, y no existe forma de saber cuándo se producirá el pago.
Algunos jugadores creen que un jackpot está "pronto" a pagar si ha pasado un tiempo desde la última vez que se pagó ese gran premio.
No obstante, al activarse de forma aleatoria, no hay manera de predecir con exactitud cuándo se elegirá al próximo gran ganador.
Esto hace que los jackpots sean muy divertidos y atractivos, pero ¡también muy frustrantes!
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