La brisca es un juego de cartas español que requiere un mínimo de dos jugadores. Requiere una combinación de habilidad y suerte, por lo que es una forma divertida de pasar el tiempo.

En este artículo de bwin encontrará una guía completa sobre cómo jugar a este juego, que incluye las reglas, los valores de cada carta y cómo calcular el puntaje de cada participante.  

El objetivo de la brisca es obtener tantos puntos como sea posible al ganar las diferentes rondas del juego.

Una de las reglas estipula que, antes de la partida, los jugadores pueden decidir cuál es la puntuación ganadora y, si alguien la alcanza, será nombrado ganador de inmediato.

Otra posibilidad es que los jugadores cuenten su puntuación una vez se hayan utilizado todas las cartas. 

En caso de que se juegue con cuatro participantes, se pueden formar dos parejas, y su puntuación total se combinará a medida que avance la partida.

También se puede jugar con 6 jugadores repartidos en dos grupos de tres.

Cuando se juega con este número de jugadores, una importante regla es que no se pueden mostrar las cartas unos a otros.

En cambio, se puede emplear señas o contraseñas, pero esto será explicado más adelante en esta guía.

En términos generales, el juego de la brisca es relativamente sencillo e increíblemente fáciles de aprender, ya que el juego enfrenta a las cartas entre sí, antes de que la más alta se lleve la ronda.

Pero vamos primero a empezar explicando el orden de las cartas y cómo jugarla con distintos mazos. 

El orden de las cartas en la brisca es ligeramente diferente al de otros juegos.

Cada carta tiene un valor específico asignado para efectos de puntuación. Estos valores son:  

• Sotas - 2 puntos. 
• Caballos - 3 puntos. 
• Rey - 4 puntos. 
• Tres - 10 puntos. 
• As - 11 puntos. 

El resto de las cartas no tienen valor a la hora de puntuar, pero se utilizan durante cada ronda, o cada "baza".

Cuando se juega una "baza", la jerarquía está representada por los puntos de cada carta: las sotas ganan a los 10, los caballos a las sotas y los reyes a los caballos.

Esto significa que las cartas numeradas pueden seguir siendo útiles y, si son del mismo palo que la carta del triunfo, esto puede darle a los jugadores la posibilidad de aumentar su puntuación. 

Antes de comenzar a hablar sobre el modo de juego de la brisca, es importante mencionar que se juega principalmente con una baraja española de 40 cartas.

Si se quiere jugar a la brisca con una baraja inglesa, solo basta con quitar los comodines, los ocho, los nueve y los diez.

El resto del juego se juega de forma similar que con la baraja española, solo que las reinas sustituyen a los caballos. 

Para empezar la partida de brisca, primero se debe seleccionar a un jugador para que sea el repartidor o crupier.

En la mayoría de los casos, esto se hace eligiendo cada uno una carta, asignándose el papel de repartidor a quien tenga el valor más alto.

El repartidor puede elegir dónde quiere sentarse, con su pareja sentada justo en frente.

A continuación, se barajan las cartas, antes de que el jugador de la izquierda corte el mazo. A partir de aquí, la acción transcurre en sentido contrario a las agujas del reloj. 

A cada jugador se le reparten tres cartas, que no debe mostrar a nadie más en la mesa.

Seguidamente, se pone boca arriba la carta de la parte superior del mazo, que es la "baza" de la ronda.

A continuación, se coloca el mazo encima, lo que significa que el juego está listo para comenzar.

Quien esté sentado a la derecha del repartidor puede poner la carta que desee, y luego los demás jugadores harán lo mismo. 

Si se trata de un juego de pares, las dos cartas de mayor valor competirán entre sí, al igual que las dos de menor valor.

El vencedor reclamará esas dos cartas y las colocará en una pila aparte para la puntuación.

El ganador de una ronda se determina según el valor más alto, a menos que una carta coincida con el palo de triunfo.

Por ejemplo, si la "el palo del triunfo" es el ocho de oros, entonces un dos de oros puede vencer a un rey de espadas.

Una vez recogidas las cartas, todos los miembros de la mesa sacarán una carta, empezando por la persona que haya obtenido la puntuación más alta en la ronda anterior.

El repartidor se moverá entonces hacia la derecha antes de repetir todo el proceso. 

Tal y como se ha mencionado anteriormente, el ganador final, o la pareja de ganadores, se basa en el puntaje que se determinó antes de comenzar el juego.

Cuando el valor total de las cartas del montón de puntuación alcance este número, el juego terminará.

Si juegan equipos de 2 o 3 personas, se suman los valores de sus pilas de puntuación.

Cuando se trata de partidas más cortas, los jugadores pueden solo sumar sus totales una vez se hayan terminado las cartas del mazo.

La puntuación máximo posible en la brisca es de 120, cuando se trata de una baraja de 40 cartas. 

En una partida de brisca, cuando un jugador forma parte de un grupo, este no puede comunicarse abiertamente con su compañero para revelarles el valor de sus cartas.

Sin embargo, existen algunas contraseñas que son aceptadas en la mesa, y que pueden ayudar a los jugadores a obtener información sobre lo que tiene su compañero de equipo.  

Esto puede ser útil para coordinar el juego con el fin de lograr el mejor resultado.

Por ejemplo, si un jugador está a punto de jugar una carta muy fuerte con la que es casi seguro que ganará la baza, su compañero podría evitar gastar una de sus cartas de mayor valor.

A continuación se describen algunas de las contraseñas que los jugadores pueden utilizar para su beneficio y sus significados: 

• Cerrar brevemente los ojos - No tiene cartas de triunfo en la mano. 
• Girar la cabeza hacia un lado –Los ases y tres que no coinciden con la carta de triunfo, comúnmente denominados "briscas". 
• Soplar - Decirle al compañero que no juegue una brisca o cualquier carta que coincida con el palo del triunfo. 
• Levantar la mirada - El jugador tiene un as de triunfo. 
• Guiñar un ojo - El jugador tiene un tres de triunfo. 
• Extender los labios hacia delante - El jugador tiene un rey de triunfos. 
• Torcer la boca hacia la derecha - El jugador tiene un caballo de triunfo. 
• Sacar la lengua - Tener una sota de triunfo. 

Otra seña que los jugadores pueden emplear es mirar fijamente a su compañero para pedirle que señale su mano.

Aunque estas son las señas más utilizadas, algunas parejas prefieren crear un conjunto único, si es necesario. 

Por supuesto, cuando se juega a Brisca con solo dos personas, no es necesario recordar ninguna de estas señas.

Sencillamente, cada participante jugará contra el otro, y todo lo demás funcionará de forma similar.

Una vez completada una baza, el crupier cambiará de jugador hasta que finalice la partida. 

Y es que la brisca es un excelente juego de cartas para dos personas.

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